La tradición de hacer un calendario del Adviento tiene sus raíces en Alemania a principios del siglo XIX. La palabra «Adviento» proviene del latín «adventus», que significa «venida» o «llegada», y se refiere a la llegada de Jesús como Salvador en la tradición cristiana.
Los primeros calendarios del Adviento eran muy sencillos y se basaban a contar los días hasta la celebración de Navidad con el uso de marcas o chispas a la pared o una mesa. Sin embargo, la idea de tener una ventanilla o una puerta que se abre cada día para revelar una imagen o una pequeña sorpresa, surgió a principios del siglo XX en Alemania y se popularizó rápidamente, extendiéndose en otros países europeos.
Hoy en día, los calendarios del Adviento se pueden encontrar en muchas formas y estilos diferentes. Muchos de ellos contienen chocolate, juguetes pequeños, y algunas versiones más creativas, incluyen actividades o mensajes especiales para cada día hasta Navidad.
La tradición del calendario del Adviento es una forma popular de hacer la cuenta atrás hasta la celebración de Navidad y de añadir una dosis de emoción y expectación a esta temporada festiva.