Hola Alicia, explícanos un poco la historia de tu empresa: cómo y cuándo se inició el proyecto y qué os motivó a emprenderlo
Nuestra historia se remonta a hace 15 años, mi marido empezó con la compraventa de vehículos de ocasión y poco a poco fue creciendo hasta que decidimos emprender el negocio juntos hace dos años. Construimos una empresa familiar y cercana donde poder satisfacer y escuchar a nuestros clientes.
¿Cómo ganáis vuestras batallas? Sobre todo en situación de pandemia.
Nuestra batalla la estamos ganando con muchas horas y dedicación, el no clasificarnos por ningún tipo de vehículos, tener stock de todo tipo de vehículos tanto económicos como de alta gama, así como de importación o nacional. Siempre escuchamos a nuestro público e intentamos satisfacer sus necesidades. Que nuestros clientes puedan salir de nuestras instalaciones con las mejores condiciones de garantía, financiación y vehículos asegurados, que el cliente solo se preocupe de decir lo que quiere y necesita, y nosotros se lo gestionamos todo.
Alicia, ¿qué os hace especiales respecto a la competencia?
Creo que la clave de nuestro éxito es el trato cercano. Cuando los clientes vienen a visitar nuestras instalaciones se sienten como en casa y no tienen la sensación de que le queremos vender a toda costa. Simplemente queremos que se sientan escuchados y cumplir con lo que quieren y necesitan. Lo que más nos gusta es recibir un nuevo cliente recomendado por otro. En ese momento te das cuenta de que estás haciendo las cosas bien.
Los clientes son lo primero imagino, ¿habéis hecho cambios o mejoras para complacer a vuestros clientes?
Siempre se pueden cambiar cosas y mejorar para crecer, por eso nos gusta preguntar al cliente qué quiere y qué necesita, y si hay que cambiar algo, se hace.
Con vuestra experiencia, ¿qué consejos daríais a alg
uien que quisiera seguir vuestros pasos? Que si se quiere llegar lejos hay que tener paciencia, sin prisa, con mucha dedicación y constancia, abrirse a todo tipo de demanda del mercado y querer aprender día a día, porque el mundo de motor cambia por momentos, y sobre todo, siempre tener presente que el cliente es lo más importante.